Qué es la ortografía, trastorno, síntomas, causas y tipos

La ortografía es una habilidad fundamental en la comunicación escrita, y es comúnmente enseñada desde temprana edad. Sin embargo, para algunos individuos, la ortografía puede convertirse en un desafío abrumador, en un trastorno que afecta la habilidad para deletrear y escribir de memoria

correctamente las palabras con sus letras correspondientes. En este artículo, hablaremos en qué consiste este trastorno, sus síntomas, cómo se manifiesta en quienes la padecen, posibles causas y tipos.

¿Qué es la ortografia?

La ortografía es el conjunto de normas y reglas que el ser humano ha establecido para regir la correcta escritura de una lengua. Su objetivo principal es establecer la forma adecuada de representar gráficamente las palabras, asegurando la comprensión en la comunicación escrita. La ortografía abarca aspectos como la correcta grafía de las letras, el uso de las tildes, las mayúsculas y minúsculas, la puntuación, entre otros elementos que influyen en la escritura formal y adecuada de un idioma.

Cada lengua tiene sus propias reglas ortográficas, y estas pueden variar entre diferentes idiomas. En el caso del español, por ejemplo, la Real Academia Española (RAE) es la institución encargada de establecer y actualizar las normas ortográficas. La correcta aplicación de la ortografía contribuye a la claridad y la coherencia en la comunicación escrita, facilitando la comprensión entre los hablantes de una lengua.

¿Qué es el trastorno en la ortografía?

El trastorno en la ortografía se refiere a dificultades persistentes y significativas en la capacidad de una persona para escribir correctamente. Se le denomina disortografía y muchos utilizan el término “disgrafía”, pero este término está más relacionado a trastornos de la grafía. El trastorno afecta de diversas maneras a personas de todas las edades. No se debe a una falta de inteligencia o a una mala enseñanza. El trastorno consiste en:

Errores frecuentes: La persona tiende a cometer errores ortográficos de manera consistente, incluso en palabras comunes y de uso frecuente.
Inconsistencia: La ortografía incorrecta puede variar cada vez que se escribe la misma palabra.
Desafíos con reglas ortográficas: Dificultades para comprender y aplicar reglas ortográficas específicas, como las relacionadas con las tildes, las consonantes dobles, las terminaciones de palabras, etc.
Confusión de letras y sonidos: Problemas para asociar los sonidos de las palabras con las letras correspondientes, lo que puede llevar a errores ortográficos.
Problemas de memoria visual: Dificultades para recordar la ortografía correcta de las palabras, incluso después de haber sido corregido en repetidas ocasiones.

Es importante destacar que el trastorno en la ortografía puede coexistir con otros trastornos del aprendizaje, como la dislexia, que afecta la lectura, pero también puede manifestarse de manera aislada, no obstante, la persona sea un buen lector.

Causas del trastorno en ortografía

Las causas del trastorno en ortografía pueden ser diversas e incluir factores genéticos, neurológicos o ambientales, pero aún no están completamente claras del todo. Algunas de las posibles causas incluyen:

Factores Genéticos: La disortografía puede tener una base genética, lo que significa que es más probable que afecte a personas cuyos familiares también la padecen.
Confusión de Letras y Sonidos: Pueden tener dificultades para asociar los sonidos del habla con las letras escritas, lo que lleva a errores en la ortografía fonética.
Dificultades en el Procesamiento Fonológico: Algunos individuos con disortografía pueden tener dificultades en el procesamiento fonológico, lo que dificulta la conexión entre los sonidos del habla y las letras escritas.
Problemas de Memoria de Trabajo: La memoria de trabajo es esencial para recordar la ortografía de las palabras, y las personas con disortografía pueden tener dificultades en esta área.
Dificultades en la Percepción Visual: Algunas personas con disortografía pueden tener problemas para percibir correctamente las letras y las palabras en una página.

Síntomas del trastorno en ortografía

El trastorno en la ortografía su principal síntoma se manifiesta con dificultades para reconocer y recordar la ortografía correcta de las palabras, incluso si leen y tienen un buen conocimiento del vocabulario y la gramática. Si la persona tiene una dificultad lectora sea leve, moderada o severa también la tendrá para la ortografia de las palabras. Este trastorno se manifiesta desde el inicio de la escolaridad, no es que se inició bien el aprendizaje y luego surgió el problema. Algunas características comunes de un trastorno en la ortografía incluyen:

Deletreo Inconsistente: Las personas con disortografía pueden cometer errores ortográficos de manera inconsistente, incluso en palabras que conocen bien.
Confusión de Letras y Sonidos: Pueden tener dificultades para asociar los sonidos del habla con las letras escritas, lo que lleva a errores en la ortografía fonética.
Dificultad para Recordar Reglas Ortográficas: A menudo tienen problemas para recordar las reglas ortográficas y las excepciones a estas reglas.
Escritura Desordenada: La escritura puede ser desordenada y desorganizada, con palabras y letras fuera de lugar.
Dificultad para Copiar Texto: Copiar texto de una fuente a otra puede ser especialmente desafiante para las personas con disortografía.

Indicadores de trastorno en ortografia en la niñez

Identificar un posible trastorno en la ortografía en un niño que se inicia en primer grado puede ser muy difícil, ya que, en las etapas iniciales de la educación, es normal que los niños cometan errores ortográficos y estén en proceso de aprender las reglas del lenguaje escrito. Sin embargo, algunos indicadores que podrían sugerir la presencia de una disortografía incluyen:

Errores Ortográficos Persistentes: El niño comete errores ortográficos en palabras simples y comunes que debería conocer y recordar correctamente después de haber recibido la instrucción adecuada.
Inconsistencia en la Ortografía: El niño comete errores ortográficos en la misma palabra de manera inconsistente, es decir, es capaz de deletrearla correctamente en una ocasión y cometer errores en otras.
Dificultad en la Asociación de Sonidos y Letras: El niño tiene problemas para relacionar los sonidos del habla con las letras escritas, lo que se refleja en errores fonéticos en la ortografía.
Dificultad en la Copia de Texto: Puede tener problemas para copiar palabras o frases de la pizarra o de un libro de manera precisa.
Resistencia o Frustración: El niño puede mostrar resistencia o frustración al enfrentar tareas de escritura o lectura, ya que pueden ser conscientes de sus dificultades y sentirse abrumados por ellas.
Escritura Desordenada: Sus escritos pueden ser desordenados y desorganizados, con letras y palabras fuera de lugar.
Desarrollo Lento de las Habilidades de Escritura: A medida que avanza el año escolar, el niño puede demostrar un progreso más lento en comparación con sus compañeros en lo que respecta a la ortografía y la escritura en general.
Dificultades en la Memoria de Trabajo Visual o Auditiva: Si el niño tiene problemas en recordar visualmente las letras o auditivamente los sonidos de las palabras, esto podría ser un indicador adicional.

Es importante recordar que estos indicadores no necesariamente indican que un niño tiene un trastorno ortográfico. Pueden ser señales de dificultades ortográficas comunes en las primeras etapas de la alfabetización. Si los maestros o padres observan una persistencia significativa en estos problemas ortográficos a lo largo del tiempo y si el niño muestra un deterioro significativo en su desempeño académico y autoestima relacionada con la escritura, es importante considerar una evaluación profesional por parte de un especialista en educación o un psicólogo educativo. Esto permitirá un diagnóstico más preciso y la implementación de estrategias de apoyo adecuadas para ayudar al niño a superar sus dificultades ortográficas.

Tipos de trastornos en ortografía

El trastorno específico en la ortografía no se suele dividir en diferentes tipos en la misma medida que otros trastornos del aprendizaje, como la dislexia. Sin embargo, es posible identificar diferentes perfiles de disortografía según las características y las dificultades específicas que presente cada individuo. A continuación, se mencionan algunos posibles perfiles de disortografía:

Disortografía Fonológica: Las personas con este perfil tienden a cometer errores ortográficos relacionados con la correspondencia entre los sonidos del habla y las letras escritas. Pueden escribir palabras tal como las pronuncian, lo que resulta en errores fonéticos en la ortografía.
Disortografía Visual: Este perfil se caracteriza por dificultades en la percepción visual de las letras y las palabras. Las personas con disortografía visual pueden confundir letras que se parecen entre sí o invertir letras en palabras.
Disortografía Superficial: Las personas con este perfil pueden tener dificultades para aprender y retener palabras que no siguen reglas ortográficas regulares, como las palabras irregulares en inglés (por ejemplo, "said" en lugar de "sed"). Tienden a cometer errores en palabras que se escriben de manera poco convencional.
Disortografía Profunda: Este perfil implica dificultades más amplias en la ortografía y puede estar relacionado con problemas en la memoria ortográfica y la conciencia fonológica. Las personas con disortografía profunda pueden tener dificultades en la ortografía tanto de palabras regulares como irregulares.
Disortografía Mixta: Algunos individuos pueden presentar una combinación de las características mencionadas anteriormente, lo que significa que pueden cometer errores ortográficos de diferentes tipos en diferentes situaciones.

Es importante destacar que estos perfiles de disortografía no son categorías estrictas ni diagnósticos formales. La disortografía es una condición altamente individualizada, y las dificultades ortográficas pueden variar ampliamente de una persona a otra. Un diagnóstico preciso y una evaluación detallada por parte de un especialista en educación o un psicólogo educativo pueden ayudar a identificar las características específicas de la disortografía de un individuo y guiar la intervención adecuada. Las estrategias de apoyo y enseñanza se adaptarán según las necesidades de cada persona.

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